Cuerpos en mi lienzo
Una mujer escribe poemas de amor y, cuando esto ocurre, se deshacen murallas y fronteras; emerge, desnuda, la poesía. Cuerpos, rostros, conjuros en la piel, pecados no confesados detienen el aliento. En Cuerpos en mi lienzo, desafueros no previstos marcan el desafío que implica el contrataque femenino. Un mar devuelve las nostalgias de otros vitales horizontes, como húmedo trasfondo de amores trashumantes, prohibidos o imaginarios. La ciudad se vuelve cobija, espacio reservado a transeúntes fantasmas, y viejos olores de época vuelven a dispersarse sobre muros y tejados.
Cuerpos en mi lienzo es un poemario de amor donde sobresalen, en perfecta simbiosis, pasión y erotismo, ternura y sensualidad, que en sus disímiles capacidades de atracción conforman un sugerente conjunto de respuestas y preguntas decisivas para la construcción del mundo interior de la autora, capaz de colocar los sentidos, describir recuerdos, susurrar afectos, muertes, despedidas y esperanzas para entregar en cada verso la búsqueda del reencuentro tras la huella en la arena o el sonido de caracoles que desborda las ganas de azul.
Más allá de visitaciones y nostalgias Cuerpos en mi lienzo, de Odalys Calderín Marín, convoca al erotismo sin reservas, al desenfado del discurso femenino, y a la expresión a todo vuelo, pero, ante todo, a esa fascinante esencia que comprende cada proyecto de Eva.