Reseña

La educación tiene un impacto exponencial en la forma-ción, en el desarrollo, en la productividad del individuo. Un ingeniero, un farmaceuta, un administrador, un médico, inclusive, no tiene los niveles de trascendencia en una sociedad como el que tiene un docente. Todos los anteriores profesionales, y los que restan, han pasado por las manos de un maestro, de un profesor, han sido guiados o formados por docentes. De igual forma pudieron ser deformados o desorientados por un docente; porque tal impacto exponencial puede ser negativo o positivo (aunque el efecto es negativo, las menos de las veces).
Así las cosas, la labor del docente, en cualquier nivel, es fundamental para el crecimiento de una nación; si un docente está formado de manera sólida, si tiene conciencia de su labor —y si le agrega a esto empeño y tesón—, tendríamos una educación de primera línea. En algunas ocasiones, con la autora, hemos conversado sobre estas cosas. Nos preguntamos cuántas veces hemos castigado el conocimiento por desconocimiento; cuántas veces hemos matado el interés, porque no hemos aplicado las estrategias pertinentes; cuántas veces hemos matado al adulto por tratarlo como niño, cuántas veces hemos matado al niño por tratarlo como adulto.
Este libro de Mariela Mirones, Estrategias docentes, es una mirada sentida al tema de la educación en Panamá. Digo una mirada sentida, porque Mariela, a pesar de que su trabajo está basado en teorías, lo ha desarrollado desde la praxis y lo ha sustentado, en vivencias directas, desde el quehacer docente en el aula. Deja intuir que si un docente tiene interés de trabajar y confianza en su oficio aprende tanto de los estu-diantes como los estudiantes de él.


Magister Bladimir Viquez
David, Chiriquí, Panamá